fbpx

En relación al anuncio efectuado por los padres de Tomás Andrés Catalán Escobar, en cuanto a que presentarán una querella criminal ante el 13° Juzgado de Garantía de Santiago en contra de profesores y representantes del Colegio Altamira por los hechos vinculados al fallecimiento de Tomás, comunicamos lo siguiente.

La familia de Tomás ya interpuso una denuncia en sede penal con fecha 18 de febrero de 2015, por medio de la cual se realizó una investigación sobre las circunstancias de la muerte de Tomás.

En el contexto de dicha investigación, la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones evacuó su informe N° 3799/1002 de 22 de julio de 2016. Dicho informe concluye que “En relación al auxilio del menor se deja en claro que tanto los docentes como compañeros de Catalán Escobar lo asistieron de manera oportuna, rigiéndose al reglamento de enfermería que dice relación con llamar inmediatamente a una ambulancia en caso de gravedad, acto que se realizó de manera oportuna y de acuerdo al protocolo del colegio […]”. De esta forma, dicho informe deja en claro que tanto el Colegio Altamira como su cuerpo docente actuaron con la mayor diligencia y apego a los protocolos aplicables.

A mayor abundamiento, con fecha 10 de junio del año 2015, los padres de Tomás interpusieron una acción de protección ante la Ilustrísima Corte de Apelaciones de Santiago, por los mismos hechos en los que se fundaba la denuncia penal. La acción incoada, tramitada bajo el rol N° 50.950-2015, fue rechazada con expresa condena en costas el 7 de agosto del año 2015. La Iltma. Corte señaló en su sentencia recaída sobre dicho recurso que, “por último, el recurso entiende conculcado el artículo 19 números 1 y 10 de la Constitución Política de la República. El primero de ellos no se ha demostrado transgredido ni esta Corte vislumbra como podría estarlo.” Fundado en este motivo, la Iltma. Corte dispuso que “se declara que se rechaza con costas el recurso de protección entablado”.

Los recurrentes decidieron, con fecha 13 de agosto de 2015, interponer un recurso de apelación en contra del fallo citado, para ser conocido por la Excelentísima Corte Suprema de Justicia. Dicho Tribunal confirmó la sentencia apelada, con fecha 16 de noviembre del mismo año.

En virtud de todos estos antecedentes, tenemos la profunda convicción que tanto nosotros, Colegio Altamira, como nuestro cuerpo docente, actuamos con apego a los más altos estándares, asistiendo de forma oportuna y diligente a Tomás. Dicha convicción ha sido ratificada tanto por las autoridades policiales como por los tribunales superiores de justicia de nuestro país, incluyendo a la Iltma. Corte de Apelaciones de Santiago y la Excma. Corte Suprema. En función de todo ello, rechazamos tajantemente todas las imputaciones que se puedan formular en contra del Colegio Altamira y sus docentes y nos reservamos desde ya todas las acciones legales pertinentes.

Tomás Catalán era muy querido por todo el cuerpo de profesores y funcionarios del colegio y lamentamos profundamente su pérdida en el Hospital Militar. Reiteramos nuestra absoluta confianza en que cada uno de los trabajadores de este espacio educativo cuidamos con esmero, cariño y responsabilidad a cada uno de nuestros estudiantes. Esa es la convicción ética que nos moviliza día a día como  educadores de un espacio que valora y promueve el respeto a la diversidad.