Mientras en gran parte del mundo se discute la obligatoriedad del uniforme escolar, estudios internacionales y la experiencia del Colegio Altamira coinciden en que permitir a los estudiantes elegir su vestimenta fortalece la autonomía, la identidad personal y la convivencia en la comunidad educativa.
En países como Estados Unidos, la evidencia académica más reciente cuestiona los beneficios de los uniformes escolares. Una investigación de la Universidad Estatal de Ohio, publicada en la revista Early Childhood Research Quarterly en 2022, siguió durante seis años a más de seis mil estudiantes de distintos colegios, desde kínder hasta quinto básico, comparando datos de conducta, asistencia y percepción de pertenencia entre quienes usaban uniforme y quienes no. El estudio concluyó que el uniforme no mejora la conducta ni la asistencia a clases; por el contrario, los alumnos que vestían uniforme reportaron un menor sentido de pertenencia con su escuela.
Para Claudio Vergara, Encaragado del Área de Convivencia Escolar del Colegio Altamira, esto coincide con la experiencia del colegio:
“El poder trabajar con la autoimagen de los estudiantes es una de las cosas que más cuesta… Entonces, desde poder reconocerse y expresarse a través de todos los canales, uno de esos es la vestimenta. Es como ellos se reconocen socialmente”.
Además, Claudio enfatiza en el impacto que tiene la vestimenta libre en la interacción social. “se sienten mucho más apropiados para otros espacios sociales y de interacción”. La libertad de vestimenta permite a los estudiantes desenvolverse en espacios fuera del colegio con mucha más soltura.
Sin embargo, el colegio tiene ciertas limitaciones. “La vestimenta no debe exponer al estudiante ni fomentar discriminación o menosprecio hacia ningún grupo. Todos cabemos en este espacio y sobre eso esperamos que nos respetemos”. finaliza.
Desde la admisión escolar, esta libertad también es altamente valorada. Claudia Herrera, Encargada de Admisión, explica:
“Corporalmente se sienten mucho más cómodos, mucho más relajados… Esto fomenta que ellos puedan valorarse desde las formas y los colores que cada uno tiene, y a respetarse también desde la diferencia”.
Claudia agrega que la vestimenta libre fomenta la autonomía, la toma de decisiones y la construcción de identidad desde los cursos más pequeños, “Tienen la libertad de escoger qué ropa usar, qué colores, cómo quieren verse, y van construyendo su propia identidad de manera gradual. Además, esta particularidad es muy valorada por las familias, porque el hecho de que cada estudiante pueda expresar su forma de ser y ser respetado por eso, tiene un valor enorme”.
En el Colegio Altamira, se fomenta una cultura de respeto, inclusión y diversidad. Como resume Claudio Vergara, “Desde lo visual, el ver un colegio colorido y diverso como este es ya un espacio mucho más grato para todos y todas”.
Fuente internacional:
EE.UU., Universidad Estatal de Ohio (2022): Uniformes no mejoran conducta ni asistencia. https://news.osu.edu/school-uniforms-dont-improve-child-behavior-study-finds/