“Llegaron entonces los ríos: los ríos del sueño, cielo y vientos
primero, los de la vida después. En notas empezaron a hablar entre ellos, en
silencios las cosas de la intimidad, en pausas las del entendimiento y en
acordes todo. Así fue el encuentro”, parafraseando al gran Raúl Zurita se
realizó nuestro tradicional Acto de Septiembre en donde dimos cabida a
todos los “Hijos de la tierra”.