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Nuestras enfermeras nos recomendaron formas de controlar el consumo de azúcar

 

Hace algunos días la Organización Mundial de la Salud (OMS) actualizó las directrices sobre los edulcorantes, en la que desaconseja su uso para controlar el peso corporal o reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles. 

Esta recomendación se sustenta en los hallazgos de una revisión sistemática, que sugiere que el uso de edulcorantes no ofrece beneficios a largo plazo en la disminución de la grasa corporal. De hecho los resultados sugieren que puede tener efectos adversos asociados a su consumo prolongado, como un incremento en el riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y mortalidad en adultos.

Conversamos con las enfermeras de nuestro colegio, quienes nos explicaron el estudio de la OMS y nos recomendaron opciones saludables para nuestra alimentación.

 

 

¿Qué creen sobre la afirmación de la OMS que desaconseja el uso de los edulcorantes?

Hay que destacar que este estudio de la OMS se realizó en personas sanas y no en personas que ya padezcan de diabetes o alguna enfermedad metabólica. Una persona con una enfermedad metabólica sí tiene que optar por este tipo de endulzante, sean artificiales o más naturales, como la splenda o la stevia.

El consumo de estos edulcorantes se usa normalmente para controlar el peso, porque se supone que, a diferencia de los azúcares, no tiene calorías. Sin embargo, genera problemas a largo plazo del tipo cardiovasculares, problemas metabólicos.

Consideramos que es un muy buen estudio porque a partir de este las personas tendrán conciencia y evitarán su consumo a largo plazo, evitando así el riesgo de padecer una de esas enfermedades.

 

¿Qué consejos o recomendaciones brindan a las y los estudiantes y sus familias sobre el control de los azúcares en el hogar y en el colegio?

En general el consejo que damos es llevar una vida y alimentación saludable, es decir evitar el consumo de bebidas, refrescos y priorizar el consumo de agua.

Recomendamos fomentar la actividad física desde pequeños, llevar un buen descanso y tener controles de salud con especialistas como por ejemplo nutricionistas. 

En el caso de que la persona tiene el hábito de consumir mucha azúcar en su vida diaria, recomendamos reducir el consumo de manera paulatina, reemplazándolos por endulzantes como la miel o dátiles, ya que dejar el azúcar de manera brusca puede llegar a producir ansiedad o estrés. 

 

Si quieres leer más sobre este tema, puedes leer la siguiente nota de La Tercera:

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